Alguna vez te has preguntado ¿merece la pena vivir? Ó ¿merece la pena luchar y seguir adelante? Llegado a ese punto, piensa… Vivir significa asumir la responsabilidad de encontrar la respuesta correcta a los problemas que se te presentan, cumplir cada aventura que la vida te asigna día a día, sacando lo mejor de ti con fuerza y positividad. Porque cuanto más te encierras en tu mundo y tus problemas, más pronto caes en un pozo del que luego resulta difícil escalar y salir. Mira las adversidades como una lección de vida y no como una desgracia para ti porque así nunca saldrás de ese pozo oscuro y del que nada ni nadie consigue que puedas escapar… Depende de ti y solo de ti que salgas de donde estás….